Vivimos en una sociedad en la que estamos cada vez más conectados, interconectados en redes y equipados con las nuevas tecnologías de la información y la comunicación digital que se desarrollan a un ritmo frenético (YUS RAMOS, 2010). En efecto, según se desprende de varias encuestas realizadas en Francia y en España, el fenómeno está en auge. Asimismo, en un informe Baromètre du numérique 2017, el Centre de recherche pour l’étude et l’observation des conditions de vie (Centro de investigación para el estudio y observación de las condiciones de vida) apunta que en 2016, un 85 % de los hogares franceses tiene acceso a Internet con una media de 18 horas de conexión semanal frente a 13 horas hace cuatro años. Asimismo, un 93 % de los franceses dispone de un smartphone. En España, según una encuesta realizada por el Instituto Nacional de Estadística para el año 2017, un 84,6 % de la población española en el grupo de 16 a 73 años tiene conexión a Internet (en aumento de 4 puntos con relación a 2016) a través de un dispositivo de mano, (principalmente 97,4 %), un teléfono inteligente o smartphone.
Por otro lado, con el advenimiento de la web 2.0 y su modelo de comunicación reticular en el que el receptor puede ser, a su vez, el emisor del mensaje (CALVI, 2016)****, los intercambios entre los cibernautas se están multiplicando en diversos espacios virtuales: foros, chats, redes sociales, comunidades, blogs,wikis, comentarios de usuarios sobre noticias o servicios. Estos espacios virtuales constituyen entornos digitales que implican nuevos modelos de comunicación que sitúan al usuario como protagonista mediante una participación activa que lo empodera. El uso cada vez más democrático de los sistemas de comunicación « mobiquitarios », que consisten en el manejo de aparatos y sistemas a través del teléfono inteligente, tabletas y ordenadores, ha supuesto una auténtica revolución en cuanto a intercambios interpersonales se refiere y ha favorecido la creación de nuevos géneros discursivos y nuevas formas híbridas con elementos de oralidad y escritura (CRYSTAL, 2001; YUS, 2001). Esta comunicación digital que crece al ritmo de las nuevas tecnologías, ha extendido su influencia a todos los sectores de la actividad humana y su impacto en la comunicación privada, pública y profesional es de gran magnitud.
Sin pretensiones de exhaustividad, el XVII Encuentro Internacional del GERES propone reflexionar sobre estos distintos aspectos e invita a los investigadores a presentar ponencias en torno a los tres ejes siguientes:
1) El español como lengua de especialidad en la era de la comunicación digital: perspectivas profesionales
En el aspecto profesional, la comunicación digital ofrece nuevas oportunidades en los nuevos perfiles profesionales adaptados a las mutaciones de la sociedad (PERLADO, 2013)*. En el ámbito del periodismo, cabe citar la profesión de editor de contenido web/digital, la de record managero la de communitymanager ; en el ámbito audiovisual, perfiles como el de arquitecto de información en la web, productortransmedia, o desarrollador multimedia son muy solicitados. En marketing, en comunicación comercial o en publicidad, los perfiles de asesor de marketing, asesor de social media marketingo director de marketing onlineson el blanco de los contratistas. En el campo de la traducción, están, por ejemplo, los localizadores. ¿Cómo se adapta el mercado laboral hispanohablante a las necesidades profesionales generadas por la comunicación digital? ¿Cuáles son las ramas profesionales que se pueden aplicar a dichos perfiles? ¿Qué impacto tienen en estas actividades? En cuanto a la profesión de docente en primaria o secundaria, tras el impulso de las políticas educativas en Francia, ¿en qué medida ha evolucionado esta profesión para exigir la competencia digital a los futuros docentes? Invitamos a los profesionales a contestar a estas preguntas y a compartir con nosotros su experiencia.
2) El español como lengua de especialidad en la era de la comunicación digital: perspectivas didácticas
El español de especialidad como lengua de comunicación digital profesional constituye pues una herramienta lingüística cuyo dominio es imprescindible. Dicho objetivo supone un proceso de enseñanza y aprendizaje adaptado a las necesidades de los aprendientes deseosos de integrar esos nuevos perfiles profesionales. Este segundo eje pretende abrir un espacio de reflexión metodológica en el marco de la práctica docente, concretamente en los procesos de enseñanza y aprendizaje del español como lengua de especialidad inmerso en un entorno digital. Invitamos a los participantes a proponer estrategias didácticas, actividades, talleres y tareas virtuales que permitan a los estudiantes universitarios adquirir y desarrollar las competencias exigidas en un entorno digital (CASSANY, 2000 ; GÓMEZ DE ENTERRÍA, 2006, 2009).
3) El español como lengua de especialidad en la era de la comunicación digital bajo el prisma de la lingüística y del análisis del discurso
Finalmente, en lingüística y en análisis del discurso, se puede considerar que la comunicación digital constituye un material discursivo relevante en la medida en que modifica los hábitos lingüísticos y los mecanismos retóricos de los hablantes (MOYA MUÑOZ, CARRIÓ PASTOR, 2018)*, y por otra parte, abarca un amplio abanico de textos que responden a necesidades sociales cada vez más diferentes y variadas. (MARCOCCIA, 2003; LABBE & MARCOCCIA, 2005)**. En este eje, se cuestionarán las características de la comunicación digital según el soporte o el entorno usado sino también sobre los géneros discursivos que le son propios (CASSANY, 2010; CANTAMUTTO & VELA, 2016; CALVI, 2016; MANCERA RUEDA, 2016; GIAMMATTEO, GUBITOSI, & PARINI, 2018). Asimismo se podrá reflexionar sobre la metodología y los preceptos de la lingüística de corpus que propone pistas descriptivas y didácticas para la traducción y la enseñanza de la lengua de especialidad.
Nous vivons dans une société de plus en plus connectée, réseautée et équipée en technologies de communication numérique qui ne cessent d’évoluer à un rythme effréné (YUS RAMOS, 2010)*. En effet, à en croire les différentes enquêtes en France et en Espagne, le phénomène n’est pas prêt de s’essouffler : le Centre de recherche pour l’étude et l’observation des conditions de vie dans son rapport Baromètre du numérique 2017**signale qu’en 2016, 85% des foyers français dispose d’internet avec une moyenne de 18 heures de connexion par semaine, contre 13 heures, quatre ans auparavant, et que 93 % français possède un téléphone intelligent ou smartphone. En Espagne, selon une enquête mandatée par l’Instituto Nacional de Estadística***pour 2017, 84,6 % de la population espagnole entre 16 et 73 ans a une connexion internet (en augmentation de 4 points par rapport à 2016) avec comme principal dispositif (97,4 %), le smartphone.
En outre, avec l’avènement du web 2.0et de sa communication réticulaire où le récepteur peut être aussi en même temps l’émetteur du message (CALVI, 2016)****, les partages et les échanges entre les mobinautes se multiplient sur des espaces virtuels divers et variés : forums, chats, réseaux sociaux virtuels, communautés, blogs, wikis, commentaires évaluatifs. Ils constituent des environnements numériques impliquant des nouveaux modes de communication adaptés. L’usage de plus en plus démocratique des technologies « mobiquitaires » de communication (tablettes, smartphones, ordinateurs) ont permis une véritable révolution dans les échanges interpersonnels, favorisant de nouveaux genres discursifs et une nouvelle forme hybride d’écriture formée d’une certaine oralité tout en conservant des caractéristiques de la scripturalité (CRYSTAL, 2001; YUS, 2001)*****. N’épargnant aucun secteur de l’activité humaine, cette communication numérique mue au rythme de ces technologies et impacte la communication privée, publique et professionnelle.
Sans prétendre à l’exhaustivité, la XVIIe rencontre internationale du GERES propose de réfléchir sur ces différents aspects, et invite à présenter des communications autour des trois axes suivants :
1) L’espagnol de spécialité à l’ère de la communication numérique : perspectives et enjeux professionnels
Sur le plan professionnel, la communication numérique offre de nouvelles opportunités dans des métiers récents adaptés aux mutations sociétales (PERLADO, 2013). Dans le domaine du journalisme, citons les métiers d’éditeur de contenu Web/numérique, de record managerou de communitymanager ; dans la communication audiovisuelle des profils tels qu’architecte de l’information sur le web, producteur transmedia, développeur multimédia sont recherchés. En marketing, en communication commerciale ou en publicité, des consultants en référencement, des consultants en social media marketingou encore des directeurs marketing onlinesont la cible des recruteurs. En traduction, nous pouvons donner l’exemple des localisateurs. Comment le monde du travail hispanophone s’adapte-t-il aux besoins professionnels induits par la communication numérique ? Quelles sont les branches professionnelles applicables à ces métiers ? Quels impacts ont-ils sur ces activités ? Dans le domaine de l’enseignement, du primaire au secondaire, comment le numérique a pu changer le métier d’enseignant à tel point que la compétence numérique, en France, est exigée aux futures maîtres ? Nous invitons les professionnels à répondre, entre autres, à ces questions et à nous faire part de leurs expériences.
2) L’espagnol de spécialité à l’ère de la communication numérique : perspectives didactiques
L’espagnol de spécialité, en tant que langue de communication numérique professionnelle, doit être un outil linguistique dont la maîtrise devient indispensable. Elle passe par un apprentissage adapté aux besoins des apprenants désireux de s’engager dans les voies professionnelles en lien avec la communication numérique. Ce deuxième axe invite donc les intervenants à proposer des méthodes et des réflexions didactiques sur un enseignement de l’espagnol de spécialité immergé dans un environnement numérique pouvant favoriser les différentes compétences assignées à l’enseignement de la langue de spécialité (CASSANY, 2000 ; GÓMEZ DE ENTERRÍA, 2006, 2009).
3) L’espagnol de spécialité à l’ère de la communication numérique sous le prisme de la linguistique et de l’analyse du discours
Enfin, en linguistique et en analyse du discours, on peut considérer que la communication numérique constitue un matériau discursif à analyser de premier choix dans la mesure où, d’une part, elle modifie les habitudes linguistiques et les mécanismes rhétoriques des locuteurs (MOYA MUÑOZ, CARRIÓ PASTOR, 2018)*, et que d’autre part, elle couvre un très large éventail de textes qui répondent à des besoins sociaux de plus en plus divers et variés (MARCOCCIA, 2003 ; LABBE & MARCOCCIA, 2005). On pourra donc dans cet axe s’interroger non seulement sur les caractéristiques de l’espagnol de communication numérique en fonction du support ou de l’environnement utilisé, mais aussi sur les genres discursifs qui lui sont propres (CASSANY, 2010 ; CANTAMUTTO & VELA, 2016 ; CALVI, 2016 ; MANCERA RUEDA, 2016 ; GIAMMATTEO, GUBITOSI, & PARINI, 2018). En outre, une réflexion pourra être menée sur la méthodologie et les préceptes de la linguistique de corpus qui propose des pistes descriptives et didactiques pour la traduction et l’enseignement de la langue de spécialité.